Un día sin sonrisa es un día perdido...

20/4/11

Saca lo mejor de ti

- ¿Si pudieras pedir un deseo que pedirías?
- ¿Uno sólo? Ser feliz, poder tocar la felicidad con la punta de mis dedos... Me encantaría quitar los problemas y dedicarme sólo a ser feliz, a pasar de los demás, y a hacer lo que yo quiera sin que nadie lo cuestione; porque es mi vida y la vivo a mi manera. Y quizás por eso me equivoco miles de veces, e incluso sabiendo lo que puedo encontrarme haciendo algo, voy y vuelvo a hacerlo... Hay quienes no lo entienden, hay quienes me llaman tonta, hay quienes me dicen que harían lo mismo que yo; pero nadie sabe lo que siento o dejo de sentir, y si hago algo es porque necesito hacerlo, porque necesito saber que me voy a encontrar después...
Pero eso también tiene sus cosas malas. Te acabas estrellando la mayoria de las veces. Aunque, eso nos pasa a todos alguna vez ¿no? La vida se basa en eso, en caer y levantarse, caer y levantarse, caer y volverse a levantar. 
Es verdad que hay veces que pensamos que ya no podemos más, que todo es demasiado complicado como para seguir así y nos acabamos rindiendo.
¿Sabes otra cosa? A mi no me gusta rendirme, por muchas veces que me caiga y me tenga que levantar, por mucho daño que me haga en la caída y que me vuelva a hacer; no paro hasta conseguir lo que quiero. Aunque tengo que admitir que esta vez siento que no puedo más, y lo siento si quizás debí luchar hasta el final o si me rendí demasiado pronto. Dije que queria luchar por esto y por ti, y demostrártelo; pero a veces las cosas se complican...
Bueno ahora quiero preguntarte algo yo, ¿crees que las segundas oportunidades merecen la pena?

- Si tienes claro que quieres luchar por alguien hasta que no puedas más y correr el riesgo de equivocarte y tener que pasarlo mal... ¿Por qué no?
- Eso mismo pensaba yo. Pero había quienes me decían que no, que eso solo ocurría en las películas, que en la vida real siempre terminaban mal. Y aun así les contestaba que me daba igual si esto acababa mal, que me daba igual si no iba a servir de nada, porque tenía claro que quería estar contigo y que quería intentarlo. Porque necesitaba saber al menos que lo intenté... Pero ya ves, creo que me volví a caer.

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